Poema inspirado en la corriente literaria del Romanticismo
Como luz de luna
¿Cómo
domino?
¡Oh!, amado mío
lo que tus ojos me provocan
y que tú sueles ignorar.
¡Oh!, amado mío
lo que tus ojos me provocan
y que tú sueles ignorar.
Si
acaso tú pudieras
ver lo que yo veo,
entonces, tal vez, entenderías
cada uno de mis lamentos.
ver lo que yo veo,
entonces, tal vez, entenderías
cada uno de mis lamentos.
Porque tus ojos
son pequeños,
diminutos, pero hermosos;
y que al verlos… ah…
simplemente yo suspiro.
diminutos, pero hermosos;
y que al verlos… ah…
simplemente yo suspiro.
¡Tus
pestañas largas!,
reflejan la paz del mar.
Frágiles, finas y llenas de sinceridad;
son por las que en la noche no paro de idealizar.
reflejan la paz del mar.
Frágiles, finas y llenas de sinceridad;
son por las que en la noche no paro de idealizar.
Tus
pupilas deslumbrantes como rayos del sol,
son luciérnagas de noche,
porque del resplandor que desprenden
expresan un misterio que sólo tú entiendes.
son luciérnagas de noche,
porque del resplandor que desprenden
expresan un misterio que sólo tú entiendes.
Tus
párpados
son suaves como un pañuelo.
En ellos se ve la profundidad de la naturaleza,
y yo adoraría por tenerlos cerca unos momentos.
son suaves como un pañuelo.
En ellos se ve la profundidad de la naturaleza,
y yo adoraría por tenerlos cerca unos momentos.
Es
que esos ojos
que son como luz de luna,
en mis noches los describo
para en el día llorar por ellos.
que son como luz de luna,
en mis noches los describo
para en el día llorar por ellos.
Hombre
eterno mío
que mis rimas no se te olviden,
porque deseo que tu corazón las recuerde
para cuando mis suspiros dejen de tener latido.
que mis rimas no se te olviden,
porque deseo que tu corazón las recuerde
para cuando mis suspiros dejen de tener latido.
me hiciste llora
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