Laberinto de mis sentimientos,
llenos de confusión eterna,
ellos aúllan porque no saben cómo actuar
en un mundo sin realidad.

Laberinto de niveles secretos,
se adhieren a mí vivir;
ya que cada momento
es un nuevo coronamiento.

Laberinto de pasto verde,
en él, las cartas pintan sus árboles,
y por culpa de un permiso
la cabeza pueden perder.

Laberinto en que no se observan salidas.
Es así como lo es mi pensamiento,
siempre encerrado,
por no tener algo a cambio.

Laberinto con un castillo,
e ahí donde habitan todos mis sueños.
Y aquel que encuentre la puerta,
se ha de encontrar con otro interminable laberinto.

Laberinto, obstáculo de mis visitantes.
Cuando dejo que salgan
pierden todo el control de lo que ellos mismos se consideraban,
pues no llegaron a ser, lo que para mí es infame.

Laberinto, paraíso de mis antagonistas.
En felicidad y amor eterna vivirán,
y cada día será igual,
sin poder experimentar otra cosa más.

Laberinto en cada estación del año.
En el invierno la nieve crea hogares pequeños,
en el otoño las hojas caídas representan mi tristeza,
y en la primavera y verano, siempre se ha de repetir todo lo anterior.

Laberinto espinoso de flores venenosas,
la lluvia nutre el interior de mis paredes,
y forma picos de muerte
que se entierran al corazón de todas las personas.

Laberinto en mi amor y mi amistad.
En él, miles no encuentran la luz de la vida,
sus cadáveres guardan mis pasadizos malditos,
y entonces yo pregunto ¿Alguien se atreve a entrar?


"El laberinto de cada ser humano contiene las más temidas pesadillas, y los más hermosos sentimientos de la vida, encuéntralos"